La constancia es la clave del éxito

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Cuando empecé a trabajar con los niños, muchos tenían serios problemas para leer y escribir. Poco a poco han logrado, por ejemplo, leer con más fluidez y abracar textos más extensos.

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15 Ene 2024

Mi nombre es Sonia Rocío Huacho Vásquez, soy docente de profesión y trabajo como profesora en NPH Perú hace seis meses. Me encargo de brindar reforzamiento pedagógico y apoyar en sus tareas escolares a los niños, niñas y adolescentes en los cursos de comunicación y matemática.  

Trabajo con ellos los martes y jueves por las tardes. Es un espacio donde además de brindarles las clases de reforzamiento, también me gusta la interacción que existe. No solo les ayudo en sus tareas del colegio o les aclaro ciertos temas de sus clases, sino que también los escucho, les brindo un tiempo para que me cuenten cómo les va en sus centros de estudio. Ellos me cuentan lo que viven en el colegio, tanto en los aspectos positivos como negativos. Me cuentan sus anécdotas, yo trato de comprenderlos y los motivo a cumplir con sus responsabilidades escolares y sus deberes en NPH Perú.  

Cuando empecé a trabajar con los niños, muchos tenían serios problemas para leer y escribir. Poco a poco han logrado, por ejemplo, leer con más fluidez y abracar textos más extensos. Algunos tampoco podían multiplicar o dividir, pero con la constancia fueron aprendiendo la tabla de multiplicación y ahora son capaces de realizar operaciones matemáticas un poco más complejas.  

Sería muy gratificante para mí ser testigo de que ellos cumplan los objetivos que se trazaron, como mejorar sus notas académicas, aprobar todas sus materias, aprobar el año escolar o terminar la primaria o secundaria. Sé que alcanzar estos objetivos, ya sean pequeños o grandes, significa un gran logro para ellos, aunque no lo expresen fácilmente. Al mismo tiempo, yo también siento que juntos vamos subiendo pequeños escalones que nos conducen a una meta más grande.  

Ellos estudian en distintos colegios públicos de San Vicente de Cañete. En algunos la educación es buena, en otros es regular, pero también veo que hay colegios donde no toman en cuenta las necesidades específicas de cada estudiante. Entiendo que es muy complicado poder brindar una educación que se adapte a cada niño y, más aún, evaluarlos según las distintas capacidades que tienen; pero muchas veces esto hace que se sientan desmotivados y no quieran cumplir adecuadamente con sus actividades escolares. 

En las sesiones de aprendizaje y reforzamiento escolar trabajamos con grupos de niños, cada grupo es muy distinto. Algunos de ellos logran sus objetivos de manera más rápida que otros. En general, están más cómodos y tienen un mejor desempeño cuando sienten que les brindamos la paciencia, tolerancia y comprensión necesarias. Esto también facilita y hace más gratificante todo el proceso de su aprendizaje. Es muy importante respetar sus tiempos y el ritmo que cada uno tiene para que logren comprender un tema y razonar para responder frente a nuevas interrogantes.      

Es un trabajo de mucha constancia por parte de ambos lados, pues ellos y nosotros tratamos de lidiar con las dificultades que ellos ya vienen arrastrando de antes o con condiciones que tratamos de mejorarlas. Los principales obstáculos que encontré al trabajar con ellos son el déficit de atención, la falta de autonomía para realizar sus actividades y, en algunos casos, la falta de obediencia para seguir indicaciones.  

El desafío que tengo es lograr que estas malas prácticas queden atrás, que ellos desaprendan ciertos hábitos que formaron anteriormente. Estoy segura de que una vez que ellos logren realizar sus tareas con cierta autonomía, el proceso de aprendizaje y desarrollo académico será más dinámico y fructífero.  

En cada sesión de trabajo, trato de fomentar esa iniciativa de trabajar de manera más independiente. Por ahora nos tienen a nosotras en la casa de NPH Perú, o a sus profesores en sus colegios, pero más adelante solo dependerá de ellos seguir para adelante, trazarse y alcanzar nuevos objetivos, y seguir aprendiendo continuamente porque el conocimiento no tiene fin.