Política de protección
Poniendo a los niños en primer lugar
En NPH ponemos a las niñas y niños en primer lugar, incluyendo su derecho a la protección y libertad de explotación y abuso. La protección infantil es el centro del cuidado familiar proporcionado por NPH.
Protección
En NPH practicamos un enfoque de cero tolerancia a la discriminación, el maltrato, el acoso sexual, el abuso y la explotación de niñas, niños y adultos vulnerables. Implementamos medidas razonables para garantizar, en la medida de lo posible, la seguridad y el bienestar de las niñas, niños y adultos vulnerables con los que trabajamos.
Protección infantil en práctica en NPH
NPH se compromete a asegurar la mejor atención posible para las niñas y niños, personas con discapacidad y adultos vulnerables mediante la implementación de programas y capacitación de personal responsable del cuidado de niñas, niños, jóvenes, personas con discapacidad y adultos vulnerables en los entornos residenciales, familiares y comunitarios donde prestamos servicio.
Protección infantil basada en acuerdos internacionales
Los proyectos pedagógicos, psicológicos y de atención médica en NPH se basan en una serie de acuerdos internacionales que afectan los derechos de las niñas y niños y el cuidado de las personas con discapacidad:
Estructura y estándares
Los estándares pedagógicos, psicológicos y médicos se establecen en manuales. Son evaluados local e internacionalmente. La capacitación regular garantiza que todos los interesados estén actualizados con los estándares actuales.
Se siguen procesos seguros de contratación y selección para todos los voluntarios, empleados, consultores y socios.
Los recaudadores de fondos no aceptarán donaciones de asociaciones y empresas cuyos objetivos comerciales no estén de acuerdo con la visión, misión, principios y valores de NPH.
Fotos y derechos de las niñas y niños
NPH sigue una estricta política de medios para garantizar los derechos personales de las niñas, niños y jóvenes. Los nombres reales son reemplazados por alias en publicaciones oficiales. Los detalles biográficos y el historial médico de los niños y jóvenes se mantienen confidenciales.
Las fotos de niñas, niños o pacientes que no vivan en un hogar de NPH, es decir, que vivan en la comunidad, solo pueden tomarse con el permiso de un padre o tutor.
También mantenemos estos estándares en el trabajo de medios y relaciones públicas de NPH. Los patrocinadores de niños, donantes y tomadores de decisiones son conscientes de los derechos de las niñas, niños y jóvenes.
Capacitación sobre derechos infantiles para niños, jóvenes y adultos vulnerables
NPH informa regularmente a las niñas, niños, jóvenes y adultos vulnerables en nuestro cuidado y programas comunitarios sobre sus derechos, cómo presentar una queja y la ayuda disponible para ellos.
NPH tiene un sistema de quejas local e internacional, y se brinda capacitación anual a las niñas, niños, jóvenes, personal y voluntarios.
Código de conducta
Todo el personal y voluntarios de NPH están sujetos a un código de conducta. Este código los obliga a respetar los derechos de las niñas y niños y los derechos humanos en general. También los compromete a proteger a las niñas y niños contra cualquier tipo de abuso. Los educadores, cuidadores y personal especializado están presentes en número suficiente para garantizar la seguridad y supervisión de las niñas, niños y jóvenes. También son responsables de mantener la alta calidad de atención personal y atención médica.
La protección es responsabilidad de todos
NPH impone la obligación de informar a todos los empleados, voluntarios, contratistas y socios sobre preocupaciones, sospechas, denuncias e incidentes que indiquen daño, abuso o explotación real o potencial de niñas, niños, personas con discapacidades y adultos vulnerables.
¿Qué entendemos por abuso?
El abuso puede tomar muchas formas, demasiadas para enumerarlas todas, pero aquí hay algunos ejemplos:
Acoso, ya sea por parte de otras niñas, niños, el personal, la familia, los visitantes o los voluntarios. Niñas y niños que se les exige realizar trabajos que no son seguros. Contacto físico inapropiado, negligencia, abuso físico, emocional o sexual.
En resumen, cualquier cosa que no sea propicia para la seguridad o el bienestar de las niñas y niños.
Reportando el abuso
NPH se asegurará de que cualquier alegación de explotación y/o abuso sexual que involucre a cualquiera de los empleados, voluntarios, empleados de nuestras organizaciones de recaudación de fondos asociadas, consultores, representantes y visitantes de NPH sea investigada a fondo.
Por qué deberías reportar el abuso
Para proteger a las niñas y niños, NPH necesita saber sobre cualquier amenaza a la seguridad o el bienestar de los niñas y niños.
Contáctanos
Alentamos a cualquier persona que experimente abuso o lo observe a informarnos sin demora.
Completa el siguiente formulario y nos pondremos en contacto contigo lo antes posible.